Que es la productividad

Qué es la productividad en la gestión

La productividad es la eficiencia de la producción de bienes o servicios expresada por alguna medida. Las mediciones de la productividad suelen expresarse como una relación entre una producción agregada y un único insumo o un insumo agregado utilizado en un proceso de producción, es decir, la producción por unidad de insumo, normalmente durante un periodo de tiempo específico[1] El ejemplo más común es la medida de la productividad laboral (agregada), por ejemplo, como el PIB por trabajador. Hay muchas definiciones diferentes de productividad (incluidas las que no se definen como ratios de producción respecto a los insumos) y la elección entre ellas depende del objetivo de la medición de la productividad y/o de la disponibilidad de datos. La principal fuente de diferencias entre las distintas medidas de productividad también suele estar relacionada (directa o indirectamente) con el modo en que los productos y los insumos se agregan en escalares para obtener esa medida de productividad de tipo ratio[2].

La productividad es un factor crucial en el rendimiento de la producción de las empresas y los países. El aumento de la productividad nacional puede elevar el nivel de vida porque una mayor renta real mejora la capacidad de las personas para adquirir bienes y servicios, disfrutar del ocio, mejorar la vivienda y la educación y contribuir a programas sociales y medioambientales. El crecimiento de la productividad también puede ayudar a las empresas a ser más rentables[3].

Qué es la economía de la productividad

La productividad es la eficiencia de la producción de bienes o servicios expresada por alguna medida. Las mediciones de la productividad suelen expresarse como una relación entre una producción agregada y un único insumo o un insumo agregado utilizado en un proceso de producción, es decir, la producción por unidad de insumo, normalmente durante un periodo de tiempo específico[1] El ejemplo más común es la medida de la productividad laboral (agregada), por ejemplo, como el PIB por trabajador. Hay muchas definiciones diferentes de productividad (incluidas las que no se definen como ratios de producción respecto a los insumos) y la elección entre ellas depende del objetivo de la medición de la productividad y/o de la disponibilidad de datos. La principal fuente de diferencias entre las distintas medidas de productividad también suele estar relacionada (directa o indirectamente) con el modo en que los productos y los insumos se agregan en escalares para obtener esa medida de productividad de tipo ratio[2].

La productividad es un factor crucial en el rendimiento de la producción de las empresas y los países. El aumento de la productividad nacional puede elevar el nivel de vida porque una mayor renta real mejora la capacidad de las personas para adquirir bienes y servicios, disfrutar del ocio, mejorar la vivienda y la educación y contribuir a programas sociales y medioambientales. El crecimiento de la productividad también puede ayudar a las empresas a ser más rentables[3].

Qué es la productividad en la ciencia

La productividad de la plantilla de una empresa desempeña un papel fundamental en su rentabilidad y competitividad. Es lógico: si se aumentan los niveles de productividad, se pueden esperar mayores beneficios sin necesidad de aumentar la plantilla. Esto aumenta la probabilidad de éxito a largo plazo en los mercados competitivos.

La productividad es una medida del rendimiento económico o empresarial que indica la eficiencia con la que las personas, las empresas, las industrias y las economías en su conjunto convierten los insumos, como el trabajo y el capital, en productos, como los bienes o servicios. La productividad puede medirse en cualquiera de estos cinco niveles:

La producción se mide normalmente como el valor en dólares o las unidades de productos y servicios que produce una empresa. Los insumos son cualquier recurso utilizado para crear productos y servicios. Los dos tipos de insumos más comunes son el capital -que incluye las inversiones en activos utilizados para la producción, como los equipos de fabricación y los ordenadores- y la mano de obra. Otros insumos pueden ser la energía, la tecnología, los materiales y los servicios adquiridos.

La productividad sube cuando la producción aumenta a un ritmo más rápido que los insumos o cuando una empresa puede generar la misma producción con menos insumos. Este es un ejemplo que muestra cómo funciona esto, explorando el efecto de diferentes insumos.

Qué es la productividad en la escuela

La productividad es la eficiencia de la producción de bienes o servicios expresada por alguna medida. Las medidas de productividad suelen expresarse como una relación entre una producción agregada y un único insumo o un insumo agregado utilizado en un proceso de producción, es decir, la producción por unidad de insumo, normalmente durante un periodo de tiempo específico[1] El ejemplo más común es la medida de productividad laboral (agregada), por ejemplo, como el PIB por trabajador. Hay muchas definiciones diferentes de productividad (incluidas las que no se definen como ratios de producción respecto a los insumos) y la elección entre ellas depende del objetivo de la medición de la productividad y/o de la disponibilidad de datos. La principal fuente de diferencias entre las distintas medidas de productividad también suele estar relacionada (directa o indirectamente) con el modo en que los productos y los insumos se agregan en escalares para obtener esa medida de productividad de tipo ratio[2].

La productividad es un factor crucial en el rendimiento de la producción de las empresas y los países. El aumento de la productividad nacional puede elevar el nivel de vida porque una mayor renta real mejora la capacidad de las personas para adquirir bienes y servicios, disfrutar del ocio, mejorar la vivienda y la educación y contribuir a programas sociales y medioambientales. El crecimiento de la productividad también puede ayudar a las empresas a ser más rentables[3].