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El valenciano es catalan
Lengua valenciana
La palabra catalán deriva del nombre territorial de Cataluña, de etimología discutida. La principal teoría sugiere que Catalunya (latín Gathia Launia) deriva del nombre Gothia o Gauthia (“Tierra de los godos”), ya que los orígenes de los condes, señores y pueblos catalanes se encontraban en la Marcha de Gothia, de donde teóricamente derivan Gothland > Gothlandia > Gothalania > Catalunya[10][11].
En inglés, el término referido a una persona aparece por primera vez a mediados del siglo XIV como Catelaner, seguido en el siglo XV como Catellain (del francés). Está atestiguado como nombre de lengua desde al menos 1652. La palabra catalán puede pronunciarse en español como /ˈkætələn/, /ˈkætəlæn/ o /ˌkætəˈlæn/.[12][5]
En el siglo IX, el catalán había evolucionado a partir del latín vulgar a ambos lados del extremo oriental de los Pirineos, así como en los territorios de la provincia romana de la Hispania Tarraconensis al sur[9] A partir del siglo VIII, los condes catalanes extendieron su territorio hacia el sur y el oeste a costa de los musulmanes, llevando consigo su lengua[9] Este proceso recibió un impulso definitivo con la separación del condado de Barcelona del Imperio carolingio en el año 988[9].
Lenguas valencianaslengua hablada
La palabra catalán deriva del nombre territorial de Cataluña, de etimología discutida. La principal teoría sugiere que Catalunya (latín Gathia Launia) deriva del nombre Gothia o Gauthia (“Tierra de los godos”), ya que los orígenes de los condes, señores y pueblos catalanes se encontraban en la Marcha de Gothia, de donde teóricamente derivan Gothlandia > Gothlandia > Gothalania > Catalunya[10][11].
En inglés, el término referido a una persona aparece por primera vez a mediados del siglo XIV como Catelaner, seguido en el siglo XV como Catellain (del francés). Está atestiguado como nombre de lengua desde al menos 1652. La palabra catalán puede pronunciarse en español como /ˈkætələn/, /ˈkætəlæn/ o /ˌkætəˈlæn/.[12][5]
En el siglo IX, el catalán había evolucionado a partir del latín vulgar a ambos lados del extremo oriental de los Pirineos, así como en los territorios de la provincia romana de la Hispania Tarraconensis al sur[9] A partir del siglo VIII, los condes catalanes extendieron su territorio hacia el sur y el oeste a costa de los musulmanes, llevando consigo su lengua[9] Este proceso recibió un impulso definitivo con la separación del condado de Barcelona del Imperio carolingio en el año 988[9].
Qué es el catalán
La palabra catalán deriva del nombre territorial de Cataluña, de etimología discutida. La principal teoría sugiere que Catalunya (latín Gathia Launia) deriva del nombre Gothia o Gauthia (“Tierra de los godos”), ya que los orígenes de los condes, señores y pueblos catalanes se encontraban en la Marcha de Gothia, de donde teóricamente derivan Gothland > Gothlandia > Gothalania > Catalunya[10][11].
En inglés, el término referido a una persona aparece por primera vez a mediados del siglo XIV como Catelaner, seguido en el siglo XV como Catellain (del francés). Está atestiguado como nombre de lengua desde al menos 1652. La palabra catalán puede pronunciarse en español como /ˈkætələn/, /ˈkætəlæn/ o /ˌkætəˈlæn/.[12][5]
En el siglo IX, el catalán había evolucionado a partir del latín vulgar a ambos lados del extremo oriental de los Pirineos, así como en los territorios de la provincia romana de la Hispania Tarraconensis al sur[9] A partir del siglo VIII, los condes catalanes extendieron su territorio hacia el sur y el oeste a costa de los musulmanes, llevando consigo su lengua[9] Este proceso recibió un impulso definitivo con la separación del condado de Barcelona del Imperio carolingio en el año 988[9].
Catalán vs. español
¿Considera la Comisión que la decisión de prohibir las emisiones de la televisión pública catalana TV3 en la Comunidad Autónoma Valenciana (España) podría entrar en conflicto con los principios fundamentales de libertad de expresión y pluralismo de los medios de comunicación recogidos en la Carta Europea de Derechos Fundamentales?
Desde hace varios años, la Generalitat Valenciana está inmersa en un proceso para poner fin a las emisiones en la Comunidad Valenciana de TV3, la televisión pública de Cataluña. Esto podría poner en peligro el pluralismo de los medios de comunicación y la libertad de expresión, dos principios fundamentales recogidos en la Carta Europea de Derechos Fundamentales.
Esta semana, ACPV, propietaria de las emisoras de refuerzo, se ha visto obligada a poner fin por completo a las emisiones de TV3 en la Comunidad Valenciana, tras ser condenada a pagar multas que no puede afrontar (30 000 euros por cada quincena de emisión). El cierre de las emisoras de refuerzo tiene una motivación política y pone en peligro tanto la libertad de expresión como el pluralismo lingüístico y mediático en la región. La estrategia del Partido Popular valenciano es negar la unidad del valenciano o de la lengua catalana, y minimizar los vínculos culturales con la vecina Cataluña.