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Retrato de felipe iii
Retrato de la infanta maría mar
Se expone por primera vez en las salas del Museo el Retrato de Felipe III de Velázquez, obra donada por William B. Jordan a los Amigos Americanos del Museo del Prado, que la han cedido al Museo como depósito a largo plazo.
Esta donación y el depósito a largo plazo en el Prado contribuirán a completar la presentación de Velázquez como retratista de la corte en el Museo. Una obra desconocida hasta ahora por los estudiosos, que arroja nueva luz sobre uno de los cuadros clave realizados por el artista durante sus primeros años en la corte: La expulsión de los moriscos.
También se exponen temporalmente Felipe III de Pedro Vidal; y Felipe IV con armadura y El infante don Carlos, ambos de Velázquez, creando así un contexto para entender el retrato de Felipe III y las razones de su atribución a Velázquez (análisis estilístico, características técnicas y su relación con La expulsión de los moriscos).
El Retrato de Felipe III es una obra inédita con rasgos estilísticos y características técnicas que permiten atribuirlo a Velázquez y relacionarlo con La expulsión de los moriscos, obra pintada en 1627 en competencia con Vicente Carducho, Eugenio Cajés y Angelo Nardi. Se perdió en el incendio del Real Alcázar (Madrid) de 1734, pero se conservan descripciones de la misma que confirman que la figura principal representada en ella es Felipe III, que aparece de pie junto a una alegoría de España y señalando a los moriscos mientras son expulsados. Velázquez nunca conoció a Felipe III, fallecido en 1621, y se basó en retratos del monarca realizados por otros artistas. Este lienzo es un estudio preliminar que utilizó para establecer una imagen del Rey, lo que explica su carácter abocetado como herramienta de trabajo y no como obra independiente y acabada.
La lección de anatomía de
El retrato ecuestre de Felipe III es un retrato de Felipe III de España a caballo realizado por Diego Velázquez. Fue pintado en 1634/35, algunos años después de la muerte del personaje, como parte de una serie de pinturas de la familia real. Destinado a ser expuesto en el Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro de Madrid, actualmente se encuentra en el Museo del Prado.
El retrato ecuestre de Felipe III fue encargado por su hijo Felipe IV. Fue pintado para la decoración del Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro, junto con los retratos ecuestres de la esposa de Felipe III, la reina Margarita, Felipe IV, Isabel de Francia y el príncipe Baltasar Carlos.
La conversión de san pa
Este retrato de Felipe III, rey de España de 1598 a 1621, es un parecido exacto del monarca, desde su altura real (alrededor de 1,5 metros) hasta su armadura, que todavía existe en la colección real. Es una de las al menos cinco versiones del retrato realizadas por el pintor de la corte Juan Pantoja de la Cruz para sustituir al rey en palacios y edificios gubernamentales. Como se puede ver en la galería y el pasillo adyacentes, presidentes estadounidenses como George Washington y John Adams adoptaron este estilo de retrato de altura completa para sus imágenes como funcionarios electos, apropiándose del poderoso lenguaje visual de la realeza.
Retrato de felipe ii, rey de españa
Retrato de Felipe II, rey de EspañaMediados de 1550Alessandro Cesati(italiano, hacia 1538-después de 1564)Italia, siglo XVICitrina, montada en un colgante de oro y esmalteColgante: 4,3 x 2,8 x 0,9 cm; Gema: 3,2 x 2,5 cm
Por intercambio: Legados de la Sra. Severance A. Millikin y John L. Severance; Fondo Dudley P. Allen; Donación de Carrie Moss Halle en memoria de Salmon Portland Halle; Donación de S. Livingstone Mather, Constance Mather Bishop, Philip R. Mather, Katherine Hoyt Cross, 2012.53 Localización
DescripciónVestido de armadura, Felipe II lleva al cuello una cadena con la Orden del Toisón de Oro. El corte, extraordinariamente preciso y variado, describe las texturas de la tela, el metal, la piel y el cabello, a la vez que presenta los rasgos del rey con un sorprendente naturalismo -completado con las entradas y la barbilla prominente-, además de transmitir su carácter enérgico. Las gemas talladas eran artes de lujo de primer orden en el Renacimiento, muy coleccionadas y utilizadas como regalos diplomáticos. El mecenas original aún no se conoce, pero los camafeos desempeñaron un papel destacado en la corte española, donde la familia real suele llevar gemas de Felipe II en sus retratos. El cuarzo amarillo, raro en el siglo XVI, probablemente procedía de una fuente recién abierta en Sudamérica; este objeto es, por tanto, tanto una maravilla natural como un retrato magistral. Es una de las tres únicas obras conocidas firmadas por el artista (sus iniciales aparecen a escala minúscula en el cuello, justo debajo del nudo de la tela), y es probable que esta piedra esté en su engaste original.