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No a la independencia de cataluña
cataluña españa
La Ley del Referéndum de Autodeterminación de Cataluña contenía la disposición de que, en caso de un resultado a favor de la independencia, ésta debía ser declarada en un plazo de 48 horas después del recuento de todos los votos. El presidente catalán, Carles Puigdemont, lo confirmó el 3 de octubre durante una entrevista exclusiva con la BBC, diciendo que “vamos a declarar la independencia 48 horas después de que se cuenten todos los resultados oficiales”[9].
Tras afirmar que consideraba el referéndum válido y vinculante, Puigdemont optó por utilizar la expresión “asumo el mandato del pueblo para que Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de república”, antes de añadir que “pediría al Parlamento que suspenda los efectos de la declaración de independencia para que en las próximas semanas podamos emprender un diálogo”.
El discurso dejó a los observadores desconcertados, ya que se esforzaron por entender si Puigdemont acababa de declarar la independencia[11][12]. Mientras que algunos comentaristas afirmaron que la independencia acababa de ser declarada y puesta en suspenso,[13][14] otros afirmaron que la declaración de independencia había sido pospuesta[2][15][16][17].
encuesta sobre la independencia de cataluña
La Ley del Referéndum de Autodeterminación de Cataluña contenía la disposición de que, en caso de un resultado a favor de la independencia, ésta se declararía en las 48 horas siguientes al recuento de todos los votos. El presidente catalán, Carles Puigdemont, lo confirmó el 3 de octubre durante una entrevista exclusiva con la BBC, diciendo que “vamos a declarar la independencia 48 horas después de que se cuenten todos los resultados oficiales”[9].
Tras afirmar que consideraba el referéndum válido y vinculante, Puigdemont optó por utilizar la expresión “asumo el mandato del pueblo para que Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de república”, antes de añadir que “pediría al Parlamento que suspenda los efectos de la declaración de independencia para que en las próximas semanas podamos emprender un diálogo”.
El discurso dejó a los observadores desconcertados, ya que se esforzaron por entender si Puigdemont acababa de declarar la independencia[11][12]. Mientras que algunos comentaristas afirmaron que la independencia acababa de ser declarada y puesta en suspenso,[13][14] otros afirmaron que la declaración de independencia había sido pospuesta[2][15][16][17].
por qué cataluña quiere independizarse de españa
2017-2018 Crisis constitucional españolaParte del movimiento independentista catalánLocalización de Cataluña (verde oscuro)- en Europa (verde y gris oscuro)- en España (verde)Fecha6 de septiembre de 2017 – 1 de junio de 2018(8 meses, 3 semanas y 5 días)LugarEspaña, principalmente Cataluña(algunos sucesos en toda Europa)Provocado por
Carles PuigdemontOriol Junqueras (detenido)Joaquim Forn (detenido)Jordi Turull (detenido)Carme Forcadell (detenida)Josep Lluís Trapero (hasta el 28 de octubre de 2017)Anna GabrielCarles RieraRoger Torrent (desde el 17 de enero de 2018)Quim Torra (desde el 14 de mayo de 2018
La crisis constitucional española de 2017-2018,[7] también conocida como crisis catalana,[8] fue un conflicto político entre el Gobierno de España y la Generalitat de Cataluña del expresidente Carles Puigdemont -el gobierno de la comunidad autónoma de Cataluña hasta el 28 de octubre de 2017- por la cuestión de la independencia de Cataluña. Comenzó después de que la ley que pretendía permitir el referéndum independentista catalán de 2017 fuera denunciada por el Gobierno español del presidente Mariano Rajoy y posteriormente suspendida por el Tribunal Constitucional hasta que se pronunciara sobre la cuestión[9][10] Algunos medios de comunicación internacionales han descrito los acontecimientos como “una de las peores crisis políticas de la historia moderna de España”[11].
la independencia de cataluña explicada
Es una situación compleja. Una combinación de agravios (algunos reales, otros inventados) alimentó este movimiento. Estaba la crisis económica que golpeó con fuerza a España desde 2010. El desempleo llegó al 25%, y al 50% para los más jóvenes (de 18 a 24 años), y no hubo una respuesta rápida. Esto provocó un malestar social que, combinado con los agravios históricos y una agenda nacionalista, ha alimentado el movimiento nacionalista catalán. El gobierno de centro-derecha del Partido Popular en Madrid ha intentado hacer frente a la situación económica con fórmulas únicas procedentes de Bruselas y Berlín, como duras medidas de austeridad y un estricto control del déficit. Esto también ha supuesto un mayor control de las finanzas de las comunidades autónomas, que son diversas tanto en sus realidades económicas como en el nivel de devolución de sus finanzas. El Partido Popular tampoco es partidario de una idea federal de España y ha intentado la recentralización para mantener a raya el déficit fiscal. Esto ha supuesto una gran oportunidad para que los partidarios del nacionalismo catalán se enfrenten a él con el fin de conseguir el apoyo que necesitan para su objetivo final de independencia.